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Manzanilla beneficios y usos

 

 

 

 

 

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La Manzanilla es una planta silvestre de gran poder curativo, usada desde antaño por nuestras abuelas y que aún hoy sigue siendo un alivio para muchas dolencias.

Esta planta crece en todas partes y su rico aroma la distingue de todas, su pequeña flor blanca con su corola amarilla, la hace simpática a los niños que juegan con ella.

Tiene muchas propiedades medicinales por lo que es recomendable conocer bien su acción curativa para cuando se necesite de su ayuda.

Esta planta nunca daña al organismo, siempre aportará un alivio a quien la use, pues su acción se hace notar en diversos problemas. Puede usarse para tomar en tés, en compresas calientes, en ungüentos, en lavados corporales, emplastos, polvos, etc.

Es eficaz en:

Dolores de cabeza, herpes, irritación de los ojos, problemas de vejiga, dolor de estómago, cólicos, diarreas, afecciones cutáneas, dolores articulares, en dolores causados por reumatismo, hinchazones, dolor de oídos, dolores de dientes y muelas, dolor de garganta, resfríados, gripes, tos, gota, ictericia, insomnio, problemas intestinales, dolores causados por afecciones hepáticas, catarros, menstruación dolorosa, acné, colon irritable, etc.

Para preparar un té hoy en día es común encontrar en el comercio Té de Manzanilla en saquitos, pero si lo quiere preparar de forma natural, deberá recoger las flores de manzanilla, lavarlas bien y dejarlas airear por unos minutos. Luego tome una cucharada de las flores y póngalas en una taza, agregue agua hirviendo y deje reposar por unos minutos, luego filtre y endulce con azúcar o miel.

En caso de catarros del pecho puede hacer el siguiente remedio casero:

Coloque en una sartén unas gotas de aceite (puede ser de oliva, girasol, maíz, uva, etc., siempre que sea comestible), enseguida ponga las flores de manzanilla machacadas a dorar en el aceite, también puede romper el contenido de un saquito de te de manzanilla y verter el contenido dentro. Antes que tienda a quemarse, retire del fuego y filtre con un colador para separar el aceite de las hierbas. Una vez tibio el aceite puede usarlo para masajear las zonas doloridas o el pecho del enfermo. De esta manera conseguirá aliviar su dolor y dormirá mejor.

Otra forma de preparar el aceite de manzanilla:

En una botella de boca ancha, vierta hasta la mitad del envase, flores de manzanilla recogidas durante el día, por supuesto que debe limpiarlas antes con agua y haber dejado que se sequen en unas horas. Agréguele después aceite de girasol o maíz. Tape bien y exponga la botella durante 15 días al sol, rotándola todos los días para que los rayos lumínicos penetren bien el envase, el cual debe ser transparente, no coloreado, de esta manera obtendrá un mejor aceite. Pasados los quince días de maceración oleosa, filtre el contenido y guarde en envase limpio bien tapado. Este aceite podrá ser usado en casos de reumatismo, dolores del pecho, gota, ciática, golpes y toda zona corporal que pueda utilizar el ungüento en casos de dolores, también en problemas de ulceraciones de la piel, manos agrietadas, piel reseca, quemaduras causadas por el sol, dolor en las articulaciones, miembros acalambrados, dolor de pies, etc.

Dolores de estómago y otros:

Quienes sufren de dolores de estómago, sea por nervios o por haber tomado frío en los pies, deben tomar todos los días un té de manzanillas, aunque si lo necesita en el momento, de igual forma le traerá alivio casi inmediato.

Quienes tengan dolor de dientes o muelas, pueden preparar un cocimiento de manzanilla, y luego cuando esté tibio, hacer buches por varios minutos hasta que se experimente un alivio.

Baños con Manzanilla:

Estos baños son muy recomendables para todas las personas, pues no tienen efectos secundarios y su acción siempre es benéfica y placentera.
Fortalecen tu aura y son buenos para acabar con las rachas de mala suerte.

Polvo de manzanilla:

Se prepara fácilmente, sea machacando manualmente las flores, como triturándolas con un molinillo de café o procesadora de alimentos. Se logra un polvo fino que puede ser usado en dolencias estomacales, resfríos, gripes, tos, etc. Se mezcla un poco del polvo con miel de abejas, hasta formar una pasta homogénea, luego se mastica más de sesenta veces antes de ingerirlo. De esta manera también encontrará un alivio natural usando manzanilla.

Almohada de Flores:

Prepárese con tela de algodón o con una funda una almohada rellena con hojas y flores de manzanilla, también puede agregarse flores de pasionaria (si dispone de ella, sino que sea solo de manzanilla). Acuéstese y trate de relajarse apoyando la cabeza en esta almohada de flores. Puede hacerlo tanto durante el día como en la noche. Esto será muy beneficioso para las personas con stress, dolores de cabeza, nerviosismo, depresiones, melancolías, cansancio. El rico y suave aroma ayudará a restablecer la armonía del sistema nervioso de una manera muy simple.
Dolores de ojos:

Hierva un puñado de manzanilla en medio litro de leche. Cuando rompa el hervor, baje el fuego y deje hervir unos minutos más. Vigile que no vuelva a precipitarse para no derramar la leche. Después entibiar y filtrar. Con las flores haga una masa, la que colocará como compresas sobre los ojos cerrados.