LA PEQUEÑA GRAN OBRA MAESTRA DE ISAAC REFOJOS EN EL PASEO MONTE BOI EN BAIONA (ES EL SANTUARIO AL QUE ME ENCANTA SUBIR A VERLO CON GRAN ADMIRACION RESPETO Y CARIÑO POR SU OBRA TAN HERMOSA ESTA ES MI OPINIÓN, ASI QUE GRACIAS A ISAAC POR CREAR ALGO TAN BELLO QUE HACE QUE DAR UN PASEO POR ALLI SEA TODAVÍA MÁS AGRADABLE PUES SU MONUMENTO ME PARECE EL MAS BONITO DE TODO EL PARADOR ME ENCANTA IR SOLO POR VERLO ES LA VERDAD!!, CADA VEZ QUE VAMOS AL PARADOR DE BAIONA LO OBSERVO DURANTE UN BUEN RATO Y SUBO A VER LAS PEDAZO VISTAS QUE AHI DESDE ALLI ARRIBA DE TODO JUSTO AL LADO DE LA VIRGEN DE FATIMA ,Y TAMBIEN A VER PORSUPUESTO LOS SANTOS PUES YO SOY MUY CREYENTE Y ME PARECE MUY CHULO SU PEQUEÑO SANTUARIO PERO GRAN OBRA DE ARTE!!.

OS LO COMENTE JUSTO EN EL POST ANTERIOR YA QUE HOY ESTUVIMOS ALLI TODA LA TARDE Y ENCONTRE POR FIN QUIEN ES SU CREADOR ASI POR SI ALGUIEN NO SABE LA HISTORIA OS LA DEJO AQUI, SIENDO SU FUENTE: EL PERIODICO LA VOZ DE GALICIA)

NOTICIA SACADA DE LA VOZ DE GALICIA EN EL AÑO 2016:

La pequeña gran obra de Isaac Carneiro Refojos se encuentra detrás del paseo de Monte Boi, en Baiona. Allá donde la fortaleza de Monterreal se asoma al Atlántico se encuentra el rincón sagrado que este octogenario vecino de Baiona ha creado con sus manos y nunca deja de cuidar. Casi todos los días acude para limpiar y mantener en perfecto estado este espacio que ya es todo un referente en el municipio. Isaac camina con dificultad para llegar a este lugar valiéndose de una muleta. A sus 82 años y, con tres prótesis encima, llegar hasta este extremo de la villa es un sacrificio que se ve recompensado cuando observa las imágenes que ha colocado de Fátima, el Corazón de Jesús, la Virgen del Carmen, Santa Ana, San Antonio y Santiago el peregrino. «No sé cómo aguanto tanto esta pierna» se queja.

Llegar hasta aquí fue ayer más difícil, puesto que lo hizo con un cubo cargado de piedras para acometer su próximo proyecto, adecentar una cueva existente en la parte superior. Siempre están pensando en cómo mejorar el entorno y la mejor forma de ejecutarlo. «A lo mejor pongo un San Telmo ahí», dice.

Muchas personas le agradecen su trabajo a diario. Los creyentes que caminan por la avenida que circunda las murallas aprovechan cuando pasan por aquí para hacer un descanso, rezar una oración o subirse al mirador de piedra para disfrutar de unas vistas espléndidas. También le suelen llevar plantas para que las coloque junto a las imágenes religiosas, a modo de ofrenda. No faltan tampoco quienes depositan flores o velas encendidas al pasar.

Ayer, por ejemplo, se acercó hasta este pequeño santuario Eduardo Rial Costas con varias plantas en una bolsa de plástico. Este marinero de Baiona anda al atún y se incorporará al trabajo a mediados del mes de enero. Su ofrenda de ayer es una forma de pedirle protección a la Virgen para cuando se vuelva a embarcar. Isaac aceptó las plantas y prometió ponerlas en un lugar visible.

Pero no todo el mundo es respetuoso. También hay vándalos y amigos de lo ajeno que no respetan este lugar. «Esta Virgen de Fátima es la quinta que tengo que poner, aunque hace ya cuatro años que la respetan», asegura. La del Carmen también la han destrozado, pero menos veces.

El escultor Manuel Quintas Vergara, conocido como el ferreiro de Sabarís, donó el pasado mes de abril una réplica de la Virgen de la Roca, que ya ha sufrido algunos golpes, según cuenta Isaac. Poco a poco, y de una forma no del todo premeditada, Isaac fue levantando su pequeño imperio espiritual en el paseo de Monte Boi. Lleva 15 años acudiendo con devoción a este rincón de Baiona para limpiar las imágenes, regar las plantas y hacer que sea un entorno agradable para quien lo desee visitar. Todo empezó porque antiguamente había en este lugar una imagen de Santa Lucía que una persona destrozó con un martillo. A Isaac le dio pena y decidió poner en su lugar una imagen del la Virgen del Carmen.

Marinero retirado, siempre anduvo a la lubina cerca de la costa, es un gran devoto de la patrona de los pescadores. Así fue como, tras jubilarse, cada día hacía pequeños trabajos con los que fue cambiando esta zona. La constancia le hizo mover toneladas de tierra que cubrían la roca.

Colocó más imágenes religiosas, construyó unas escaleras, tapó agujeros para evitar que los visitantes se pudieran caer y puso plantas y otros elementos decorativos para dar más dignidad a este entorno. También instaló unos pasamanos para hacer más fácil el acceso hacia la parte de arriba. El parador y el club de yates fueron sus grandes aliados en este trabajo dándole herramientas y luz eléctrica.

Le han robado luces de Navidad. Las que puso el año pasado se las quitaron todas y este año ya le han desaparecido cuatro.

La quinta Virgen de Fátima que coloca. Mucha gente es devota y respeta pero otra no. Ha tenido que cambiar cinco veces la Virgen de Fátima por los vándalos.

MIS FOTOS SON DEL AÑO 2021 LAS DE VERANO Y EL RESTO LAS DE HOY: