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Como cambiar de vida

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Consejos para cambiar de vida radicalmente:

A medida que nos hacemos adultos desarrollamos una serie de rutinas vitales que, si no nos planteamos cambiar, nos acompañarán a lo largo de nuestra vida.

Algunos de estos hábitos pueden ser positivos no hay nada de malo en que estemos acostumbrados a pedir las cosas “por favor”.

La buena noticia es que, por muy arraigado que esté un hábito, este se puede cambiar si conseguimos sustituirlo por otro.

El desarrollo de nuevas costumbres se hace más difícil a medida que nos hacemos mayores, pues nos cuesta más detener el piloto automático que rige nuestro día a día.

Nuestros cerebros se acomodan fácilmente a la rutina y sacarles del carril que tienen marcado requiere de esfuerzo y dedicación. Pero, pese a esto, merece la pena intentarlo.

Al fin y al cabo, lo único que puede hacernos más felices es el cambio de aquellas cuestiones de nuestra vida que no acaban de convencernos.

A cierta edad todo el mundo necesita cambiar algo, ya sea la alimentación, la manera en que nos relacionamos con otras personas o nuestra forma física.

A la hora de desarrollar un nuevo hábito, lo primero que tenemos que hacer es convencernos de las ventajas que tiene su práctica.

¿Nos hará sentirnos mejor? ¿Seremos más felices? ¿Mejorará nuestra calidad de vida? ¿Y nuestra salud? ¿Será beneficioso para la gente que nos rodea? Si descubrimos que la respuesta a todas preguntas es afirmativa, tendremos la motivación suficiente para acometer el cambio, pero con esto no basta. El camino será complicado, y estará lleno de baches. Por ello, es conveniente que vayamos paso a paso, siguiendo estos puntos.

1. Divide tu objetivo en metas alcanzables

Si, por ejemplo, tu objetivo final es hacer deporte todos los días, tendrás que ir incorporando el hábito poco a poco. Si nada más empezar corres una maratón lo más probable es que, en primer lugar, no la acabes, y, en segundo lugar, no vuelvas a intentarlo nunca, pues te dolerá todo el cuerpo. Empieza desde el principio, poco a poco, y ve incrementando el esfuerzo a diario. No importa cuál sea tu objetivo, tienes que tener claro que no lograrás alcanzarlo de la noche a la mañana. Los cambios vitales requieren un esfuerzo y deben implementarse poco a poco.

2. Modera tus expectativas

El perfeccionismo no es un buen compañero. Si al principio las cosas no salen como esperabas, y fallas al incorporar el nuevo hábito, no desesperes. Inténtalo de nuevo poniendo un objetivo menos ambicioso. Si, por ejemplo, tu objetivo es volver a estudiar, quizás tres horas todos los días sea demasiado. Mejor empieza con media hora y, si tras ese tiempo no estás cansado y ves que puedes continuar, añade otra media, y así sucesivamente.

3. Elige bien los tiempos

A la hora de incorporar una nueva actividad a nuestra vida debemos elegir bien el momento en que vamos a llevarla a cabo. Todos tenemos momentos en el día en que nos encontramos más activos. Hay personas que rinden más de día y otros que lo hacen más de noche. Lo mejor es realizar la nueva actividad en nuestro mejor momento, aunque tengamos que desplazar otras tareas. Incorporar un nuevo hábito requiere de todo nuestro esfuerzo, y nos costará menos arrancar si lo hacemos en el momento del día adecuado.

4. Cambia tu lenguaje

Para que un cambio de hábito fructifique tenemos que evitar usar expresiones del tipo “estoy obligado a hacer” o “tengo que hacer” por “quiero hacer” o “he elegido hacer”. Parece una tontería, pero el hecho de que nos convenzamos de que la nueva actividad que vamos a realizar es una elección personal que mejorará nuestra vida es decisivo, y el lenguaje ayuda a apuntalar esta idea.

5. Haz que sea divertido

A la hora de desarrollar un nuevo hábito vital el aburrimiento puede ser uno de nuestros peores enemigos. Ya sea a la hora de cambiar nuestra dieta, o empezar a hacer deporte, toda nueva rutina puede ir asociada al hastío. No en vano podemos pensar que si no lo hemos hecho antes es porque no era algo divertido. Lo mejor para vencer esta resistencia es acompañar nuestro cambio de otras cosas que sí nos diviertan. Si nos aburre hacer deporte, quizás nos parezca más llevadero con música, y si estamos cambiado nuestra dieta, quizás será más divertido si innovamos con las recetas. Todo cambio vital se puede hacer de muchas maneras, lo importante es encontrar el modo que encaje con nosotros.

6. Enorgullécete de tus progresos

La motivación es decisiva para incorporar un nuevo hábito a nuestra vida, por ello, a medida que avanzamos, debemos ser conscientes de nuestro esfuerzo y nuestros progresos. Celebra cada paso que des en la consecución de tu objetivo y mantén la alegría hasta el final. Una vez que el hábito esté arraigado, formará parte de tu vida todo el tiempo que desees

7. Abandona la actitud de víctima

La actitud de víctima nos coloca en el extremo de la posibilidad de cambio, ya que cedemos el poder que tenemos sobre nuestro destino a otros.

Lo que realmente hacemos en esta situación es:


Culpar a otros de nuestros propios problemas ( la familia, nuestro jefe en el trabajo, nuestros padres, etc.)


Nos imponemos límites donde realmente no los hay. En nuestra propia palabra negamos la posibilidad de cambio: “nunca voy a conseguir dejar de fumar”…


Nos abandonamos y dejamos de lado nuestras posibilidades de cambio.

Personalmente me considero una afortunada por lo que he recibido en la vida y la suerte que he tenido por mi familia, salud y educación.

No todas las personas han tenido igual suerte, y en cada rincón vemos víctimas de la injusticia y de la mala suerte por no haber podido recibir una educación o haber nacido en el sitio inadecuado.

Sean las circunstancias que sean, siempre existe la posibilidad de cambiar, de mejorar y subir un peldaño en la escalera de la superación personal.

Salvo que estés en circunstancias muy particulares siempre es posible cambiar de vida radicalmente… por ti mismo.


8. Estar abiertos al cambio… ir a por él !

Seamos sinceros, a todos nos gustan los cambios inesperados, los golpes de fortuna. 

Si te ha tocado la lotería, enhorabuena, eres uno entre un millón.

En lugar de esperar que la fortuna llegue del cielo, enfócate a todas las vías en las que tu mismo puedes cambiar tu vida radicalmente. Simplemente deja de lado lo que no esté bajo tu control.

Haz una lista de ideas, separa los objetivos en pequeñas tareas para construir tu vida.



9. Toma la responsabilidad de tu vida

Aquí llega el momento de aceptar tu propia responsabilidad para cambiar de vida radicalmente.

Todos hemos pasado por decisiones dolorosas, difíciles, y en gran parte de ellas nos hemos paralizado.

El ser humano está programado para responder en situaciones de estrés de una forma muy parecida a como lo hacían nuestros antepasados cuando tenían que cazar o morir:


Correr (huir)


Paralizarnos (bloqueo)

Enfrentarnos (atacar)

Lo llevamos en los genes, queramos o no nuestro comportamiento en momentos límite obedece estos tres patrones.

Por desgracia dentro de las anteriores posibilidades, muchas veces la opción que tomamos es la de parálisis. Nos quedamos quietos, no avanzamos, tampoco tomamos una decisión.

Muchas veces el motivo es simplemente falta de alternativas, pero…

Lo más importante es tener opciones: si no es la opción 1 es la opción 2, pero cuando no tenemos más y no podemos elegir… entonces tendremos que encontrar la opción 3.

Lo complicado es buscar y generar esa opción 3 sin descuidar el resto de nuestra vida.

Cuando deseamos algo intensamente en una situación de crisis es fácil dejar de cuidarnos, abandonarnos, posponerlo todo hasta que salgamos de esa situación complicada.

De hecho es en estos momentos delicados cuando más nos tendríamos que cuidar a nosotros mismos.

Antes de seguir, tenemos que tener claro algo muy importante:

Los sueños se cumplen.

El problema es que no suele ocurrir en el momento que queremos.

Cuántas veces nos ha ocurrido sentirnos acorralados ante dejar o no a una persona, sentirnos vacíos?… cuando más tarde nos dimos cuenta que esa persona ya estaba a nuestro lado y no nos dimos cuenta.

¿Cuánto esfuerzo hemos hecho en un trabajo y hemos intentado cambiar sin resultado aparente, y de repente un buen día nuestra vida da un giro radical y nos acercamos a nuestro sueño de una forma que nunca hubiéramos esperado… ni planificado?

No es un problema tener pocas opciones, de hecho el exceso de alternativas nos podría impedir tomar una decisión. Lo que importa es buscar esa opción 3 fuera del entorno conocido, fuera de lo que hasta ahora hemos intentado y nos resulta “cómodo”.


10. Encuentra tus trucos de automotivación
. Las ideas no valen nada si no se ejecutan


Encuentra tus
trucos de automotivación

No tengas miedo de actuar distinto a lo que ves en tu entorno. Es lo que el mundo necesita.

Celebra los pequeños logros. El puzzle se compone de muchas piezas
Piensa diferente, actúa diferente


Si no es cara o cruz… cambia la moneda !

Es tu vida, puedes cambiar de vida radicalmente. Acepta tus retos y tómalos. Tus creencias crean tus pensamientos, tus pensamientos crean tu realidad.

¿Cómo cambiar tu vida ? al cambiar tus pensamientos , o mejor dicho al cambiar tu manera de pensar, el mundo que te rodea cambia, tu vida cambia.

¡Cambia tu Vida, Sé Feliz!

Por esto estás aquí, para ser feliz. No valen las excusas: es que «Yo soy así» o «Yo he nacido así» o «es que tengo mala suerte», «soy demasiado viejo/a para cambiar», «no puedo» etc.

Somos víctimas de la ilusión de que la realidad existe independientemente de nosotros y que no podemos cambiar.

Lo queramos o no, el mundo es el reflejo de nuestros pensamientos y nuestros sentimientos nos indican si lo que pensamos nos hace sentir bien o no, o sea si vamos por el buen camino o no. 


Nuestros pensamientos provienen de lo que creemos y lo que creemos viene de lo que nos han repetido desde pequeños nuestros padres, hermanos, profesores.. de lo que vemos en televisión, cine…lo que hemos leído en libros, prensa etc.


Con la repetición, la información se graba en nuestro subconsciente hasta estar convencidos de que algo es cierto y pasa a formar parte de nuestras creencias.

La realidad que nos hace sufrir es ESO… nuestro EGO con sus falsas creencias y la No aceptación de lo que es AHORA.(¿ Cuantas veces nos gustaría que algo o alguien fuese diferente de lo que es o de quien es ?)

Cuando hablo de que nuestras creencias, nuestros pensamientos crean nuestra realidad, me estoy refiriendo a los pensamientos con fuerte contenido emotivo, los que sentimos, los que nos impactan de un modo u otro.

(Si no fuera así nuestro mundo podría ser un caos con los casi 60.000 pensamientos diarios que tenemos) y la mejor manera de saber lo que crees y piensas realmente en temas como el amor, la pareja, el dinero, los hijos ,el trabajo, la salud… es mirar lo que está sucediendo en tu vida Ahora.

¿ Eres Feliz? ¿ Tienes dinero? ¿Tienes buena salud? ¿Te gusta tu trabajo?etc.

Es muy importante dejar de odiar, de tener miedo, envidiar… ya que todo estos pensamientos están cargados de emotividad con energía negativa y es por ello que casi siempre nuestros miedos más fuertes siempre se cumplen.

Cambia el odio por Amor, el miedo por seguridad, la indignación por la indiferencia, la tristeza por la alegría, …


¡Si no te gusta tu Vida, lo que tienes en tu vida… Cambia tus creencias, cambia tus pensamientos Ahora! La solución está dentro de ti, no fuera.

En primer lugar es bueno cuestionar todo lo que escuchas, todo lo que lees y todo lo que ves, incluso lo que estás leyendo en esta página web.

No dejes que nadie te diga lo que tienes que pensar…

Mantén siempre tu mente abierta y sigue aprendiendo de numerosas fuentes.

Busca y sabrás, según vaya tu vida, los pensamientos y las creencias que tienes que liberar y cambiar o no y cual es la técnica o la manera que mejor funciona para ti. «Tenéis que cuestionarlo todo.

Cuidando de aceptar las cosas que digo sin analizarlas sinceramente, desde vuestro centro que no os puede engañar.

No hay que tragar nada – sólo conseguiríais una nueva programación encima de la que tenéis – , sino cuestionarlo, analizando esto y lo opuesto. Esto supone apertura.

Hay que ser receptivo sin ser crédulo.


Luego, y esto es lo que me está ayudando más (y quizás pueda ayudarte a tí) céntrate en el presente, en lo que estás haciendo AQUÍ y AHORA en este momento preciso, que es lo único que existe y que existirá jamás e intenta no perder tiempo y energía pensando en las cosas que no quieres o haciendo suposiciones sobra tal o cual cosa. En el AQUÍ y AHORA es donde estás creando tu futuro.

Piensa siempre en lo que deseas, en lo que te gusta… siempre en tiempo presente y siempre en positivo como si ya lo tuvieras.


¿ Por cierto sabes que de todo lo que hacemos durante el día el 95% lo hace el subconsciente y el 5% el consciente…(según Lichtman el uso consciente sería del 0,0001% y el resto hasta el 100% para el uso inconsciente) ?

¿A ver quién gana? Por eso es tan importante cambiar el Subconsciente que no analiza y actúa en el presente con la base de datos que tiene, cuando el consciente (quién si analiza) a menudo está demasiado ocupado navegando por un pasado y un futuro que no existen.


No voy a decir que se pueda formatear nuestro disco duro ( perdón por la comparación) en 4 días, pero afirmo que sí se puede cambiar día a día y mucho más rápidamente de lo que se podría suponer.

En todo caso si yo puedo hacerlo y lo estoy haciendo todo el mundo puede hacerlo. 

Para cambiar tu vida solo necesitas saber exactamente lo que deseas, estar motivado y perseverar.

Todo está dentro de ti, lo tienes TODO en este momento AQUÍ y AHORA.

Para liberarte, lo que necesitas es darte cuenta de tu programación y de las premisas falsas en que apoyas tus acciones.

«El movimiento del Nuevo Pensamiento es una manera nueva de pensar acerca de nosotros mismos y de los demás, acerca de la vida y de Dios.

Es una manera nueva de utilizar nuestro pensamiento como herramienta para la creación de nuestra realidad.»

«Son nuestros pensamientos lo que nos hacen lo que somos. Nuestra actitud mental es el factor X que determina nuestro destino. Emerson dijo: «Un hombre es lo que él piensa durante todo el día».

¿Cómo él podría ser otra cosa? Yo sé ahora, con una convicción que no admite duda, que el mayor problema que usted y yo encaramos en realidad, casi el único problema, es la elección de los pensamientos acertados.

Si somos capaces de esta elección, estamos en el camino que conduce a la solución de todos nuestros problemas. Marco Aurelio, el gran filósofo que gobernó el Imperio Romano, resumió esto en ocho palabras; son ocho palabras que pueden determinar nuestro destino: «Nuestra vida es la obra de nuestros pensamientos». Sí, si tenemos pensamientos felices, seremos felices.

Si tenemos pensamientos desdichados, seremos desdichados.

Si tenemos pensamientos enfermizos, caeremos probablemente enfermos.

Si pensamos en el fracaso, seguramente fracasaremos.

Si nos dedicamos a compadecernos, todo el mundo huirá de nosotros. » Según un hombre piensa en su corazón, así es él»

«Todos los pensamientos positivos, sentimientos e intenciones no te van a llevar a grandes resultados a menos que agregues tomar la acción correcta en el orden correcto para lograr el resultado específico que deseas. Elije las estrategias y tácticas correctas y lograrás cualquier cosa que desees».

¿Puede una idea transformar tu vida?

Ya lo creo que sí. No sabrás de dónde vendrá ni cuándo llegará, pero una sola idea puede cambiar tu percepción de la realidad, de lo que es posible y liberar, con ello, tu potencial de las ataduras autoimpuestas del pasado.

Normalmente no se trata de algo inmediato, “conozco la idea y me transformo”, sino que, según mi experiencia, suele ser algo que crece de forma paulatina dentro nuestro hasta que llega un momento en el que ya no hay forma de detenerlo.

Si has visto la película Origen (Inception) te puedes hacer una idea, pues es algo similar: se introduce la idea, crece, arraiga en nuestro cerebro y toma el control, alterando nuestra voluntad y convirtiéndonos en alguien nuevo.

“Una sola idea de la mente humana puede construir ciudades. Una idea puede transformar el mundo y reescribir todas las reglas.


Las ideas son semillas que pueden crecer y alterar el curso de las personas, y del mundo por extensión, para bien o para mal. Es por ello que es tan importante recibir y promover la difusión de ideas positivas, por nuestro bien y el de todos.

Yo hoy quiero aportar a la causa mi granito de arena.

Voy a compartir contigo 7 sencillas ideas que un buen día entraron en mí, crecieron, arraigaron en mi cerebro y me convirtieron en alguien nuevo, alguien mejor. Lo puedo decir: me transformaron.

De igual modo que lo hicieron por mí, ahora pueden hacerlo por ti, si les dejas.

Estas son:


1. Todos en Esencia Somos Iguales

Las diferencias entre unas personas y otras son mínimas.

Somos todos tan parecidos como gotas de agua.

Hace unos días leí que el ser humano comparte con el chimpancé el 99% de la información genética. Bien, si tan sólo nos diferenciamos del chimpancé en un 1%, imagínate ahora cuán poco nos diferenciamos entre nosotros. Nada, prácticamente.

Por lo tanto, si de base todos somos iguales, o prácticamente iguales, no hay excusas. No hay una diferencia de capacidad sino de actitud. La actitud lo es todo en esta vida.

Esta idea cobra todavía más relevancia si la juntamos a una segunda idea, la siguiente:


2. Si Otro Puede, Tú Puedes

Si todos en esencia somos iguales entonces todos estamos capacitados para lograr lo mismo. Sea lo que sea lo que otro haya conseguido está a tu alcance, si estás dispuesto a luchar por ello.

Esta idea te convierte en alguien imparable. Nada ni nadie te podrán detener, si tú no quieres. ¿Cómo funciona? Cuando aspires a conseguir algo y lo veas muy lejano, casi como un sueño imposible, busca a alguien que ya lo haya conseguido (cualquier persona del mundo, del pasado o del presente) y dite a ti mismo: “Si tú lo has conseguido, ¿por qué no voy a conseguirlo yo? Tú y yo en esencia somos iguales, por lo que nada que tú tengas o consigas me estará vedado”.

Recuerda, lo que marca la diferencia entre personas no es su capacidad de base, que es prácticamente igual, sino su actitud. Si tienes la actitud, la mentalidad y las ganas de luchar todo está a tu alcance. ¿El siguiente paso? Ampliar constantemente tu conocimiento y ponerlo en práctica día sí y día también.

Lo imposible se vuelve posible cuando juntamos el conocimiento, la actitud y la disciplina.

El conocimiento guía tus pasos; la actitud hace que avances a pesar de los obstáculos y de las circunstancias; la disciplina y el trabajo son los pasos que te mueven. De faltar uno los otros dos se vuelven inútiles. En cambio, los tres juntos hacen milagros, convierten lo imposible en posible.

3. Si No Te Gusta Hacia Donde Te Diriges, Cambia de Rumbo

¿Hacia dónde te diriges? No hacia donde te gustaría dirigirte, sino hacia donde te diriges, de verdad. El ser humano es la única especie que puede mirar hacia el futuro. Y diría más, es el único que puede ver el futuro. Sí, ver el futuro.

Dime qué haces con tu tiempo, dime los resultados que obtienes de su uso, dime qué planes tienes para mañana y te diré adónde te diriges y dónde terminarás probablemente.

Nuestros pasos dejan huellas. No es difícil proyectar una dirección basándonos en los pasos que ya hemos dado, en los que estamos dando en estos momentos y en los que planeamos dar mañana. Eso es ver el futuro.

Examina tus resultados y proyéctate a 5 años vista. ¿Dónde estás? ¿Te gusta lo que ves? Si la respuesta es “no”, es hora de cambiar de rumbo.

Para iniciar un cambio sólo necesitamos una cosa: una decisión.

Si tú decides cambiar, el cambio ya se ha iniciado. Esta es una idea poderosa. “Hoy voy a dejar de fumar”; “hoy empiezo a entrenar”; “hoy empiezo a leer al menos media hora cada día”; “hoy inicio mi negocio”; “hoy se inicia una nueva vida, hoy cambio de rumbo”.

Una nueva vida se inicia con la chispa de tu decisión. Pero la decisión no es suficiente para que el cambio se materialice, necesitas que la chispa se convierta en fuego, en un fuego que nunca se extinga, a pesar de las adversidades que se presenten en su camino. ¿De qué hablamos? En una palabra: disciplina.

Por lo tanto, el cambio es posible si hay decisión (el cambio empieza) y disciplina (el cambio se va materializando con tiempo y esfuerzo).

¿Cómo cambio de rumbo? Decide tu nueva dirección. Márcate unos objetivos claros. Haz un plan para llegar a ellos. Lucha cada día remando en esa dirección. Así de simple, así de difícil.

4. Si Ayer Pude, Hoy Puedo y Mañana Podré

Si lo has hecho una vez podrás hacerlo dos, tres, cuatro y las que sean necesarias. Si antes hemos visto como el ejemplo de otros nos hace creer en nuestra capacidad, ahora se trata de creer en nosotros mirando a nuestros logros pasados. Es algo así como: “Si yo pude, entonces ahora y siempre podré. Yo soy el mismo, por lo tanto puedo volver a conseguir lo ya conseguido“.

La primera vez que conseguí una matrícula de honor durante la carrera algo cambió en mí. Me dije: “Si he podido hacerlo una vez puedo hacerlo todas las veces que quiera, siempre y cuando lo quiera de verdad”. Así fue, lo conseguí en todas aquellas asignaturas que me lo propuse de verdad. Lo mismo es aplicable a cualquier esfera de tu vida. Si pudiste, puedes y podrás, siempre y cuando lo quieras de verdad y luches por ello, HASTA que lo consigas.

Poderosa palabra: Hasta. Lo intentaré HASTA que lo consiga.

De pequeño probaste a mantenerte de pie hasta que lo conseguiste, probaste a andar hasta que lo conseguiste, probaste a hablar hasta que lo conseguiste, probaste a leer hasta que lo conseguiste, probaste a escribir hasta que lo conseguiste. Pues bien, lo mismo debe ser hoy en tu vida adulta con las cosas que te importan de verdad. Hazlo hasta que lo consigas.



5. No Te Conformes con Hacerlo Igual que Ayer, Hazlo Mejor

El que se conforma con hacer las cosas igual que ayer no progresa, y el que no progresa acostumbra a retroceder. Cada vez que vayas a repetir una acción que ya hayas hecho en el pasado dite a ti mismo: “Hoy lo voy a hacer mejor que la última vez”. Da igual que la última vez ya lo hubieras hecho muy bien, pues todo siempre es susceptible de mejora, siempre podrás mejorar el resultado pasado. Cada día debes aspirar a mejorar lo ya conseguido.

No hace falta que de un día para otro se produzcan grandes avances. Con que mejores tan sólo un poco en cada intento es suficiente para conseguir, con el tiempo, cambios asombrosos en tus resultados. Paso a paso, detalle a detalle, pero siempre a mejor.

No tienes excusa para no conseguirlo, pues hoy estás más preparado que ayer, tu capacidad es mayor porque has aprendido de tu experiencia acumulada. Así que si no lo consigues no es por falta de capacidad, sino por falta de actitud y de trabajo. Lo ves, de nuevo la actitud y la disciplina marcan la diferencia entre unos y otros, entre el conformismo y el inconformismo, entre el éxito y el fracaso.



6. No Gastes, Invierte

No gastes en comprar cosas que quieres. En vez de eso, invierte en activos que generen los ingresos que te permitan comprar lo que quieres.

Yo no gasto dinero, invierto. Invierto en activos que generan ingresos que me permiten o me permitirán comprar lo que quiero. Y lo mejor de todo, comprado lo que quiero, el activo sigue ahí generando ingresos, creando abundancia en mi vida en vez de escasez.




7. Distánciate del 95% de la Población


97%, 98%, 95%, tanto da. Aléjate de las mayorías y pasa a formar parte del 5% restante. No te estoy pidiendo que te alejes físicamente, aunque es cierto que te conviene rodearte de personas que formen parte de ese 5% restante de la población. Aquí estamos hablando de no imitar las conductas, los hábitos, las aspiraciones, las excusas, las actitudes de esa mayoría.


¿Cuánta gente mira la televisión cada día? El 5% NO lo hace.

¿Cuánta gente aspira a un trabajo estable por cuenta ajena? El 5% NO lo hace.

¿Cuánta gente no lee buenos libros al menos media hora al día todos los días? El 5% SI lo hace.

¿Cuánta gente destina cada mes un porcentaje de sus ingresos a formación continuada, tanto profesional como personal? El 5% SI lo hace.

¿Cuánta gente se queja todos los días de su mala fortuna o de sus circunstancias? El 5% NO lo hace.

¿Cuánta gente culpa a otros de sus problemas y no se hacen responsables de su situación actual? El 5% NO lo hace.

¿Cuánta gente dedica al menos un rato cada semana a analizar su vida y planificar su futuro? El 5% SI lo hace.

¿Cuánta gente se esfuerza por mejorar sus habilidades comunicativas? El 5% SI lo hace.

¿Cuánta gente lucha por sus sueños, pero los de verdad, y no simplemente por amasar fama, fortuna y poder? El 5% SI lo hace.

Y así me podría pasar un buen rato, pero no lo haré, porque la idea queda clara.

No imites a las mayorías, desconfía de ellas, pues seguramente lo que hacen o cómo lo hacen no te conviene.

Arrímate y aprende del 5%, de los que luchan por sus sueños, de los que no se arredran ante las adversidades, ni culpan a otros de su situación, y, en definitiva, de los que viven la vida según sus propios términos.

¿Quieres vivir según tus propios términos? Únete al 5%.

Aquí tienes, 7 ideas que transformarán tu vida, si les dejas.

Conmigo lo hicieron y por eso hoy estoy aquí contándotelas, porque confío en que te servirán a ti también y a todo aquel que esté dispuesto a darles entrada en su vida.

Por supuesto, el proceso de búsqueda, aprendizaje e interiorización de ideas no termina aquí, justo empieza.

Las ideas nos hacen evolucionar como personas, por ello, si queremos evolucionar para bien vamos a necesitar descubrir, aprender e interiorizar cuantas más buenas ideas mejor.