Una laguna de agua cristalina a tan solo 1 hora de Vigo para refrescarte este verano
El calor del verano hace obligatorio buscar refugios para disfrutar de una jornada a remojo. Algo que ya se ha convertido en un auténtico plan en sí mismo para los vecinos y las vecinas de Vigo.
A pesar de contar con playas como Samil, O Vao o los espectaculares arenales de las Islas Cíes, hay quienes prefieren alternar y disfrutar de paraísos más desconocidos.
Alrededor de Vigo hay un amplio abanico de opciones para disfrutar de la naturaleza con piscinas naturales que parecen sacadas de película. Pero a un poco más de distancia, Portugal esconde algunos parajes que todavía resultan desconocidos para muchos. Lugares que bien merecen una ruta de una hora para pasar todo el día nadando en las aguas cristalinas del país vecino.
Lagoa da Esturranha
Se trata de un verdadero refugio, en el sentido más estricto de la palabra. Este espacio natural preserva un ecosistema local en el que conviven especies autóctonas de flora y fauna.
A esta riqueza, se le suma también la belleza del entorno, con una corriente de agua que mantiene lo espacios de baño limpios, superficies lisas para tumbarse escuchando el sonido de los pájaros y algún sobresaliente desde el que saltar cuando hay suficiente profundidad.
Localizada en Viana do Castelo, se alimenta de las agua del río Âncora.
No es demasiado grande en cuanto a tamaño, pero los días que no va tanta gente (algo que sucede de manera frecuente), se convierte en un escenario estupendo para conectar con la naturaleza.
La Serra d’Arga, además, ofrece multitud de maravillas que permiten disfrutar de todo un día de ocio, con rutas de senderismo.
Esta laguna es ideal para visitas familiares, el agua no es demasiado profunda en la mayoría de su superficie, por lo que nadie corre peligro.
También hay espacios donde comer, jugar a las cartas o a algún juego de mesa.
Cerca hay sitio para aparcar el coche, y solo será necesario caminar unos pocos metros hasta encontrarse con las aguas turquesas de este paraje.
Cómo llegar
Cerca de la fregesía de Freixiedo de Soutelo, junto a la carretera N305, se encuentra esta refrescante laguna. No hay más de 15 kilómetros desde Viana de Castelo hasta la Serra d’Arga donde se encuentra, tan solo hay que seguir la A-28 o, como otra opción, la N-302.
Ruta de senderismo por hasta la laguna
Existe una ruta que pasa por la laguna que permite conocer el entorno y entrar en calor antes de disfrutar de un baño allí. Parte de Freixieiro de Soutelo, un encantador pueblo en el municipio de Vila Praia de Âncora. Sigue hacia la iglesia de São Martinho, donde destaca un mural de azulejos azules y blancos.
A partir de este punto, se abandona el asfalto para adentrarse en un paisaje natural. El recorrido atraviesa bosques de robles, eucaliptos y coníferas, ofreciendo un entorno tranquilo y pintoresco. Aunque hay algunas cuestas y una bajada pronunciada, en general, el camino es accesible para cualquier persona con un nivel básico de condición física.
Después de aproximadamente una hora de caminata, se vislumbra el Santuario de Nossa Senhora da Cabeça, una iglesia del siglo XVIII construida en estilo manierista. A pesar de las reformas a lo largo de los años, conserva su impresionante retablo original y es conocida por su tienda de exvotos de cera y una escalinata imponente. Es un lugar de gran importancia cultural y espiritual en la región, frecuentado por numerosos visitantes anualmente.
Un punto destacado del recorrido es la visita a la Lagoa da Esturranha. Aunque supone un pequeño desvío, vale la pena disfrutar de este entorno relajante y sereno antes de finalizar la ruta.