El verano es sinónimo de sol, playa y relax, pero también es una época donde los robos en la playa aumentan.
La Guardia Civil, siempre atenta a proteger a los ciudadanos, compartió un ingenioso truco para mantener nuestros objetos de valor a salvo mientras disfrutamos de un día en la playa.
El consejo es buscar alguno de los muchos objetos antirrobo con forma de utensilio de playa (como falsos botes de crema o cepillos del pelo) que se venden online y en muchas superficies y guardar ahí nuestras pertenencias. Estos envases resultan perfectos para guardar pequeños objetos de valor como el móvil, las llaves o el dinero. Es un método sencillo y eficaz que ha sido probado por muchos bañistas con éxito. Los botes de crema solar, especialmente aquellos con rosca, ofrecen un escondite ideal y discreto.
Además de las botellas de crema solar, existen otros métodos ingeniosos que recomiendan tanto la Guardia Civil como los expertos en seguridad playera.
Por ejemplo, utilizar un pañal de bebé falso. Parece una idea un poco inusual, pero es extremadamente efectiva. Simplemente, coloca tu móvil, dinero y llaves dentro de un pañal limpio, dóblalo como si estuviera usado y déjalo junto a tus cosas. Los ladrones rara vez se interesan en revisar pañales aparentemente sucios.
Otra opción es camuflar tus pertenencias dentro de un paquete vacío de toallitas húmedas. Primero, mete todo en una bolsa de plástico, introdúcela en el paquete y luego rellénalo con toallitas para disimular. Este truco es ideal para aquellos que buscan una solución rápida y económica.
Para los más precavidos, enterrar los objetos en la arena puede ser una solución. Coloca tus pertenencias en una bolsa hermética y entiérrala discretamente bajo la toalla. Este método requiere un poco más de esfuerzo, pero es bastante efectivo.
Si prefieres no llevar objetos de valor a la playa, turnarse con tus amigos o familiares para vigilar las cosas es la práctica más lógica.
No obstante, si estás solo, siempre puedes pedirle a los vecinos de toalla que echen un ojo a tus pertenencias. La mayoría de la gente estará encantada de ayudarte, ya que probablemente esperarán que tú hagas lo mismo por ellos.
Finalmente, la recomendación más sensata de todas: evita llevar objetos de gran valor a la playa. Si no es estrictamente necesario, es mejor dejarlos en casa o en un lugar seguro. La playa debería ser un lugar de disfrute y relajación, no de preocupación por posibles robos.