La afonía es un término que se refiere al trastorno relacionado con la pérdida total de la voz y disfonía a sus alteraciones parciales. Ambas son producidas por una inflamación de la laringe, de la faringe o una amigdalitis Se presenta con mayor frecuencia entre los fumadores y entre consumidores de bebidas alcohólicas, así como en las personas que utilizan mucho la voz (locutores, cantantes, maestros, oradores, etc.).
Cuando padecemos del resfriado común, es muy probable que empecemos a tener una serie de dolores en la garganta y es que se empieza a crear una infección que provoca una serie de problemas en nuestras cuerdas vocales y todo a lo referente a la laringe. La afonía o también llamada ronquera, es una de las afecciones más comunes después de un resfriado mal cuidado, debido a que este problema afectara nuestra voz, hasta poder llegar al punto de no poder hablar por días.
Causas de la afonía
Existen una serie de causas de la afonía, por lo que debemos prestar atención a estas para evitar un resfriado y más adelante una infección en la garganta que provoque la afonía y nos deje sin poder hablar durante días.
Los cambios climáticos: Cuando estamos expuestos a temperaturas muy elevadas, en un principio el principal afectado es la garganta, después nuestro organismo comienza a acostumbrarse de las temperaturas.
Sin embargo, cuando volvemos a estar expuestos a una temperatura menor, esto deriva la afonía, debido a que al estar expuestos ante cambios demasiado bruscos de temperatura, las cuerdas vocales sufren daños hasta derivar la afonía y muy posiblemente la infección.
Resfriado común: Esta es otra de las enfermedades comunes que pueden causar la afonía, esto se debe a que conforme la mucosa que se acumula durante el resfriado, causa que se expanda a la zona de la garganta, hasta llegar a nuestras cuerdas vocales, esto hará una serie de malestar y es muy probable encontrar la ronquera cómo un factor principal.
Mojarse: Cuando nos bañamos o mojamos por una lluvia o cualquier cosa similar, se debe mencionar que este problema, causara la afonía inmediatamente. De cierta manera, esto tiene que ver con los cambios climáticos, pero al quedar nuestro cuerpo expuesto, hace que sea más probable.
Factores de origen accidental
Abuso de tabaco y de bebidas alcohólicas. Utilización desmesurada de la voz. Emociones, ira.
Alteraciones causadas por una enfermedad que afecta a otras partes del Organismo
Enfriamiento. Difteria.
Enfermedades crónicas que debilitan el tono muscular e impiden el acercamiento de las cuerdas vocales (la persona habla con un «hilo de voz»).
Remedios populares
Tomar caldos de borraja o calabacín: pues estas dos verduras son ricas en mucílagos y poseen una acción suavizante de las mucosas.
Triturar, con la licuadora, una cebolla: y luego agregar dos cucharaditas de miel. Colar la mezcla y beber unas tres cucharadas.
Hervir un vaso de agua: dejar enfriar y agregar el jugo de un limón. Luego, hacer gárgaras dos veces al día.
Consumir rodajas de piña natural: o bien beber su zumo para la recuperación de la afonía, ya que sus ingredientes revitalizan los tejidos de las cuerdas vocales.
Hacer, varias veces al día: gárgaras con una cucharada de sal en una taza con agua.
Llenar un lavabo con agua caliente: e inclinarse sobre él. Después, colocar una toalla sobre la cabeza y el lavabo, a manera de «tienda», para que se junte el vapor. Respirar por la nariz el vapor.
Trocear 2 puerros grandes: y poner a hervir en un litro de agua durante 20 minutos. Después, colar el caldo y tomar a lo largo del día.
Mezclar 2 cucharadas de vinagre de manzana: calentado a unos 50°, en un vaso de agua tibia. Tomar un sorbo grande y efectuar gárgaras. Luego escupir.
Tomar otro sorbo grande, pero esta vez tragarlo, para que la preparación llegue a las zonas de la garganta que la gárgara no alcanzó. Repetir este procedimiento una vez cada hora mientras dure el síntoma.
Infusión de menta: La menta es ideal para la afonía, debido a que además de relejar nuestras cuerdas vocales, también ayuda a limpiar nuestra laringe de la infección que se tenga.
Se recomienda que esta se ingiera antes de ir a dormir y también hacer algunas gárgaras para que se pueda limpiar un poco nuestra garganta. Debemos tomar esta infusión mientras se tenga el malestar en nuestra garganta.
Té de limón con miel: Este té es muy recomendado por nuestras abuelitas, debido a que la miel es un antihistamínico que ayudara a limpiar las bacterias que se tengan acumuladas.
De igual forma, si se tiene infección, ayudará a erradicarla rápidamente. Se recomienda tomarlo después de la cena y es que de esta forma sería lo último que ayudará a cuidar nuestras cuerdas vocales.
Coca-Cola con limón: Un vaso de refresco de cola con limón, puede resultar perfecto para darle una limpieza y también una relajación a nuestra garganta. La coca cola deberá calentarse en nuestro horno de microondas y es que cuando se calienta, al tomarla y llegar a nuestra garganta además de limpiar, también nos ayuda a que se pueda tener un poco más de habla o al menos no sonar tan “roncos”.
Un vaso de agua templada con limón y miel: La miel, si es natural y no está procesada (se reconoce porque está espesa a temperatura ambiente), ejerce una acción antiséptica y suavizante de las mucosas de las vías respiratorias. El ácido cítrico del limón potencia la acción de la vitamina C y tiene un efecto antiséptico y antibacteriano.
Para recuperar la voz y revitalizar las cuerdas vocales: es muy útil comer rodajas y tomar jugo de piña.
Preparar un caldo con dos puerros: grandes y un litro de agua. Se debe dejar hervir por 20 minutos. Es aconsejable beberlo a lo largo del día.
La zanahoria: es otro de los alimentos que puede ayudarte a recobrar tu voz; para ello, tendrás que hervirlas, cortarlas a trozos y exprimirlas bien para poder beberte el jugo resultante.
Sorber líquido: durante todo el día lo cual ayuda a mantener húmedas las cuerdas vocales. El agua a temperatura ambiente es la mejor, porque es más fácil para la garganta.
Recomendaciones
Evitar fumar, ya que el humo puede empeorar la condición.
Practicar una respiración adecuada y usar la voz sin cansarla lo menos posible principalmente si se tiene una profesión que demande la utilización continua de la voz.
Mantener limpias las vías nasales, ya que al respirar por la nariz el aire pasa más húmedo y caliente y, por ello, no irrita las cuerdas vocales).
Evitar que su hijo (mayor de cinco años) con afonía o disfonía trate de hablar. Para ello, se puede implementar un juego la comunicación no verbal con señales con la mano para expresiones frecuentes como «puedo» o «dame» o también puede dejar a su alcance lápiz y papel.
Mantener el volumen de voz bajo. Aun después de que regresó la voz, debe tener cuidado de no forzar nuevamente las cuerdas vocales para que el problema no regrese. Lo mejor es hablar en voz baja y no gritar. Si se trata de hablar por encima del ruido de fondo, solamente dañará sus cuerdas vocales.»
Adoptar una dieta abundante en vitamina A se encuentra principalmente en las zanahorias, los tomates o el brócoli, y la C en los cítricos y los kiwis.
Evitar tratar de hablar. Debido a que la afonía usualmente involucra la inflamación de las cuerdas vocales, es necesario el reposo y no tratar de hablar.
No tomar agua fría o helada, ya que ésta contrae los vasos sanguíneos en la laringe y fuerza a calentar el agua.
Evitar respirar por la boca, ya que puede irritar aún más las cuerdas vocales.
Dejar que la garganta repose, no forzar mucho la voz y hablar lo necesario. Ayuda consumir miel de abeja y productos tibios como tés e infusiones, en caso de que ninguno de los remedios para la ronquera aquí mencionados no funcione, es necesario asistir con un médico especialista.