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Remedios Naturales para hernia discal

Tratamientos naturales que nos ayudan a mejorar Hernia discal:

¿Qué es la hernia discal? Nuestra columna vertebral está formada por unos huesos llamados vértebras y unos discos que son los que nos permiten poder movernos, agacharnos y no sentir dolor. Cuando uno o más de estos discos sufre una lesión y se escapa de entre los dos huesos provocando una presión de los nervios alrededor de la espina dorsal, recibe el nombre de hernia. Una vértebra es cualquiera de los huesos que conforman la línea de la columna vertebral.

Los seres humanos en la niñez tienen 7 vértebras cervicales, 12 torácicas, 5 lumbares, 5 sacras y 4 o 5 en el área del cóccix, y durante la etapa adulta se reducen a 26 debido a que los huesos del sacro y el cóccix se sueldan convirtiéndose en un hueso cada uno.

Entre la parte anterior y posterior de las vértebras se forma un conducto, el canal medular, en cuyo interior se sitúa la médula espinal. También entre las vértebras se forman unos agujeros, llamados de conjunción, uno a cada lado de la vértebra, por donde salen las raíces nerviosas desde la médula

Cada vértebra se separa una de otra por medio de un disco intervertebral, a excepción de las 5 vértebras del sacro y las 4 del cóccix pues están unidas. Los discos intervertebrales son núcleos de tejido conectivo laxo o pulposo cuya función es la de amortiguar durante los movimientos vertebrales.

El tejido de los discos intervertebrales tiene un alto contenido en agua que suele disminuir en algunas personas con la edad, lo cual provoca que con los años la columna pierda elasticidad y capacidad para soportar tensiones y pueda realizar movimientos ágiles y variados.

Los cambios degenerativos en los discos conducen a una pérdida de resistencia del mismo y el anillo fibroso al volverse incompetente puede desplazarse posteriormente (protrusión discal), incluso puede romperse. Esto es lo que se conoce como hernia de disco y puede producir síntomas por compresión de raíces nerviosas o incluso por compresión medular, en casos severos.

Las hernias discales suelen ser más frecuentes a nivel cervical y lumbar, ya que estos segmentos son los más móviles de la columna. Estas hernias producen frecuentemente por tejido degenerativo, aunque también se producen en ocasiones por traumatismo.

Además, se debe mantener una dieta balanceada y rica en alimentos de calidad como vegetales, frutas, cereales integrales y alimentos antioxidantes que ayuden a regenerar bien los tejidos del organismo. Tomar suficiente agua durante el día (2 litros de agua) también es indispensable para que el cuerpo mantenga sus niveles de humedad siempre en óptimas condiciones y pueda llevar a cabo todas sus funciones y actividades regenerativas de forma eficiente.

Las hernias discales suelen tratarse principalmente con reposo y la administración de analgésicos y anti-inflamatorios de fisioterapia. Si además se conjuga esto con una dieta adecuada, puede haber resultados muy positivos, las personas se pueden recuperar y volver a sus habituales tareas

Síntomas de la hernia discal


El dolor provocado por este aprisionamiento del nervio produce dolor en toda la espalda, sigue por la pierna y en muchas ocasiones llega al pie.

Se puede ver afectada la rodilla, sobre todo su parte posterior.

Es el nervio ciático el que siente la presión, por ese motivo el dolor recorre toda la pierna.

Caminar, toser, estornudar o simplemente estar sentado nos provoca un dolor severo en toda esta parte afectada.

El dolor nocturno puede llegar a ser insoportable.

Aunque es más normal sufrir una hernia discal a partir de los 30 años no debemos descartar que la enfermedad pueda aparecer en cualquier edad.

Lumbalgias repetitivas pueden ser un aviso de hernia discal.

El 30% de la población sana que tiene protrusiones o hernias discales que no causan ningún síntoma también puede tener algún día un dolor de espalda común causado por un mal funcionamiento de la musculatura o a una contractura muscular.

Dolor de espalda o en una o en las dos piernas.

El dolor de la espalda depende del lugar donde se ubique el disco afectado.

En ocasiones, el dolor se extiende hasta los glúteos o por detrás del muslo y hasta la pantorrilla. En ocasiones, puede haber entumecimiento de las piernas.

El dolor de la hernia empeora cuando se realiza actividad física, y suele menguar cundo se reposa.

Síntomas de la hernia de disco cervical:

Dolor cervical, especialmente en la parte posterior o lateral

Dolor profundo, cerca o sobre las paletillas del lado afectado del hombro

Dolor irradiado al hombro, parte superior del brazo, antebrazo y en ocasiones a la mano, los dedos o el tórax

Empeoramiento del dolor al toser, hacer esfuerzos o reír

Incremento del dolor al doblar el cuello o girar la cabeza hacia un lado

Espasmo de los músculos cervicales

Debilidad de los músculos del brazo.

Cómo podemos desinflamar esa hernia:

Para empezar la mejor forma de tratar la hernia es llevando una vida sana, lo mejor es prevenir esa hernia discal, y la nutrición es el pilar de la prevención.

Es necesario mantener unos hábitos de vida saludables, ejercicios como yoga, taichi, natación, pesas y sobre todo estiramientos adecuados para mantener flexible la columna vertebral.

¿Qué alimentación ayuda en el tratamiento de la hernia discal?

Debemos incluir en nuestra dieta alimentos libres de tóxicos, alimentos biológicos y mantener el cuerpo hidratado bebiendo agua mineral.

Leches vegetales, Cereales, Algas marinas, Legumbres, Pescados mejor que carne, Frutas, Verduras, Frutos secos.

Debemos evitar los siguientes alimentos inflamatorios y acidificantes:

Carnes rojas, Azúcar, Trigo, Maíz, Patatas, Soja, Frutos secos. Frutas tropicales, Miel, Lácteos, Carnes rojas.

Todos los alimentos que contengan productos químicos, conservantes y colorantes.

Gluten, Sal de mesa, Harinas blancas, Comida basura

Debemos tener en cuenta los alimentos que nos puedan resultar intolerantes:

Una alimentación basada en cereales no integrales, azúcar, trigo, carne, lácteos, es una alimentación inflamatoria y acidificante. Cuanto más acidificado está el organismo más inflamación sufren los tejidos y por consiguiente las hernias si no las hay se pueden producir y si ya están instauradas pueden empeorar o incluso aparecer otras.

Hay casos de hernia discal o dolores persistentes en ciertas partes del cuerpo que se ven agravados por la ingesta de ciertos alimentos.

Las algas marinas, la levadura de cerveza, las bayas y los cítricos, así como el ajo, los granos integrales, las leches y aceites vegetales, el pescado y las legumbres, no deberán faltar en tu dieta en caso que desees prevenir hernias o ayudar a tratarlas. Se deben evitar a toda costa los azúcares y harinas refinados, fritos, embutidos y los procesados o comidas chatarra que solo llenan el cuerpo sin otorgarle ningún valor nutritivo, degenerando y acelerando el deterioro y el envejecimiento del cuerpo.

Remedios naturales para el lumbago, la ciática y las hernias de disco:

Infusión de tomillo, orégano y cola de caballo. Se pueden calmar los dolores de ciática con una infusión de diferentes hierbas, cuya acción conjunta es anti infecciosa, anti inflamatoria y astringente:

Ingredientes1/2 lt de agua 1 pizca tomillo 1 pizca de cola de caballo

Preparación1. Hervir las plantas a fuego lento durante cinco minutos.2. Dejar reposar diez minutos.3. Colar y guardar. Forma de tomarla Tomar tres tacitas templadas al día siempre antes de las comidas. El tratamiento se puede prolongar, si conviene, hasta sesenta días.

La fitoterapia para relajar espasmos en la espalda suele ser efectiva como relajante muscular en casos de dolores agudos.

La fisioterapia es una clave para la recuperación de afecciones discales. El terapeuta o profesional puede dar una guía muy eficaz para cuidar su columna y ayudarle a recuperarse.

El sobrepeso es una condición que resulta pésima para la columna vertebral, la cual se tiene que forzar para carga el peso extra, acelerando el desgaste de los discos intervertebrales. En caso de sobrepeso, se recomienda empezar con una dieta depurativa que ayude a limpiar a fondo el cuerpo y elimine de forma eficaz la grasa y toxinas del cuerpo.

Corteza de sauce blanco: Hervir por 10 minutos dos cucharadas de corteza de sauce blanco y tomar cuatro tazas al día de este preparado, previamente colado

Infusión de tomillo y romero: Preparar una infusión con un par de cucharadas de cada ingrediente y tomar cuatro veces al día para que haga su efecto.

Raíz de harpagofito: Preparar una infusión hirviendo un par de cucharadas de esta raíz y tomar dos tazas de este remedio natural para la hernia discal al día.

No levantar peso ni hacer movimientos bruscos: Darse un baño de agua caliente de vez en cuando ayudará a aliviar un poco el dolor.

Sentarse de una forma cómoda y recta, porque si os sentáis en mala posición solo empeoraréis la situación.

Dormir rectos, para que la columna este recta y así el disco se mueva menos.

En todos los casos le recomendamos consultar con su médico.

Mal de dos