Desde hace siglos, las velas encendidas son como faros que guían en la oscuridad a quienes buscan un camino.

Sus llamas titilantes siempre son más que simples fuentes de luz: son portadoras de esperanza, instrumentos de manifestación y, en suma, medios para desentrañar muchos secretos.

Una de las propiedades atribuidas a las velas es la de allanar caminos cerrados por diversos obstáculos. En otras palabras, ayudar a una persona a desarrollarse a pesar de circunstancias adversas.

Como las velas presentan distintos colores, también tienen diversos significados. Esta variedad hace que cada una de ellas tenga un propósito diferente.

En este sentido, una de estas velas, de un determinado color, resulta la más efectiva a la hora de vencer los obstáculos y tener el camino libre para avanzar.

¿Qué color de vela se utiliza para abrir caminos?

Según su color, las velas pueden asociarse con distintos significados. Conocerlos es una buena manera de comenzar a familiarizarse con esta práctica. Porque en la vida se nos presentan distintas circunstancias, distintos momentos en los que veremos que hay más de un camino para recorrer y, por tanto, para iluminar.

Las velas amarillas son un símbolo de claridad mental, creatividad, inteligencia y comunicación. Esto hace que se utilice para abrir caminos hacia nuevas ideas, proyectos y oportunidades educativas.

El blanco es un color que siempre significa pureza, protección y purificación. Por eso, las velas blancas se utilizan para limpiar las energías negativas y para crear un lienzo limpio, ideal para “escribir” nuevos comienzos y oportunidades.

En el lenguaje de las velas, el azul simboliza la calma, la paz, la serenidad y la armonía.

De esta manera, conviene utilizar las velas azules para abrir el camino hacia la tranquilidad emocional, la comunicación pacífica y la resolución de conflictos.

Las velas de color verde tienen relación con la salud, la prosperidad, la abundancia y el crecimiento. Por eso, las velas verdes se utilizan comúnmente para atraer el dinero, el éxito y las oportunidades financieras.

Debido a su poder como imán para el éxito, las velas verdes son muy valoradas. Además de ser el color de los billetes de dólar, por ejemplo, el verde representa la naturaleza, la fertilidad y el crecimiento.

Este color también es símbolo de la energía de la renovación y la expansión, lo que convierte a estas velas verdes en una elección poderosa para aquellos que buscan un camino despejado de obstáculos.

Al encender una vela verde con la intención de abrir caminos, se invoca la energía de la abundancia y la prosperidad en todas sus formas. Esta energía atrayendo hacia la persona oportunidades financieras, profesionales y personales que les permitan avanzar en la vida.

El color naranja de las velas representa la energía, la vitalidad, la creatividad y la alegría. Las velas de color naranja, entonces, se usan para abrir el camino hacia la inspiración, el entusiasmo y la pasión.

Como cada color de una vela es ideal para un camino u otro dentro del estado de nuestras vidas, antes de encenderla hay que tener bien en claro la intención que está detrás del ritual. Hay que ser específico en el deseo.

Otro aspecto importante es observar la fase lunar, porque la luna creciente es socia del crecimiento y la manifestación; mientras que la luna llena, es socia de la plenitud y la realización.

Pero no menos importante es la constancia que tengamos en nuestros pedidos. Hay que repetir el ritual con regularidad para reforzar la intención, mantener la conexión con lo espiritual y, sobre todo, lograr resultados efectivos.