Las Rías Baixas esconden verdaderos tesoros históricos y arquitectónicos, y sus monasterios son algunos de los ejemplos más impresionantes de la espiritualidad y el arte gallego. Un turismo más relajado, lejos de la masificación y que impresiona a quienes descubren las joyas que esconde la provincia de Pontevedra.

Estos seis monasterios recomendados de las Rías Baixas bien podrían justificar una escapada por sí mismos, o combinándolos en forma de ruta. Desde luego, son esenciales y una maravillosa forma de introducirse en el turismo arquitectónico.

¿Qué monasterios visitar en Pontevedra?

Más allá de las grandes catedrales y las construcciones archiconocidas, estos son seis enclaves menos conocidos y que resultan esenciales para todos los vecinos y las vecinas de la provincia de Pontevedra.

Monasterio de San Lourenzo de Carboeiro

Situado en Silleda, el Monasterio de San Lourenzo de Carboeiro es un magnífico ejemplo del románico gallego. Fundado en el siglo X, este impresionante edificio, enclavado en un entorno natural rodeado de bosques y a orillas del río Deza, destaca por su mezcla de estilos románico y gótico. Actualmente en proceso de restauración, su iglesia y claustro permiten disfrutar de su belleza arquitectónica.

Visitarlo obliga a pensar en el paso del tiempo, en cómo unas construcciones tan básicas han resistido tantos años y en el valor que tiene conservar estas joyas.

Monasterio de Santa María de Aciveiro

Fundado en el siglo XII en la Serra do Candán, en Forcarei, el Monasterio de Santa María de Aciveiro es una joya del románico cisterciense. Este monasterio combina la sobriedad y la armonía de sus líneas arquitectónicas, con una historia que lo ha convertido en uno de los centros religiosos más importantes de la Galicia medieval. Hoy en día, funciona como un alojamiento rural, lo que permite disfrutar de una experiencia única en plena naturaleza.

Monasterio de Santa María de Armenteira

Este monasterio cisterciense, fundado en el siglo XII y situado en el corazón de la comarca de O Salnés, cerca de Meis, es famoso tanto por su belleza arquitectónica como por su leyenda vinculada a San Ero, su fundador. El Monasterio de Armenteira, rodeado de viñedos y frondosos paisajes, es un lugar de serenidad ideal para pasear por la Ruta da Pedra e da Auga, un recorrido que permite disfrutar de la historia y la naturaleza de la zona.

Monasterio de San Xoán de Poio

Ubicado cerca de Pontevedra, el Monasterio de San Xoán de Poio es uno de los más importantes de la provincia y tiene una historia que se remonta al siglo VII. A lo largo de los siglos, ha sido un punto de encuentro para peregrinos del Camino de Santiago. Sus claustros, el gran mosaico sobre el Camino y su biblioteca son de gran interés. Además, el monasterio sigue habitado por una comunidad de monjes benedictinos que mantienen viva su espiritualidad.

Monasterio de San Salvador de Lérez

A pocos kilómetros de la ciudad de Pontevedra, en la parroquia de Lérez, se encuentra este monasterio benedictino fundado en el siglo X. Con una ubicación estratégica cerca del río Lérez, su iglesia y sus jardines han sido testigos de una larga historia de poder y devoción. Aunque actualmente el edificio ha perdido parte de su estructura original, sigue siendo un punto destacado en la historia monástica de la región.

Monasterio de Santa María de Oia

Este impresionante monasterio fortificado se alza frente al Atlántico, en la localidad costera de Oia. Fundado en el siglo XII, Santa María de Oia es un ejemplo único de monasterio cisterciense junto al mar. Sus gruesos muros han sido testigos tanto de la vida monástica como de las incursiones piratas.

Hoy en día, el monasterio está en proceso de restauración, pero su majestuosidad y su entorno lo convierten en una visita imprescindible en la costa gallega.

Estos seis monasterios no solo destacan por su relevancia histórica y religiosa, sino también por su integración en el paisaje gallego, lo que los convierte en destinos perfectos para descubrir la cultura y el patrimonio de las Rías Baixas.