19 de octubre: Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Mama
Como cada año, el 19 de octubre es el día de sensibilización sobre el cáncer de mama.
Un asunto para tomarse a pecho
El cáncer de mama ha aumentado su incidencia, pero también la tasa de supervivencia por la enfermedad se ha ampliado y casi el 90% de las mujeres que lo padece logra superarlo gracias a la detección temprana y el tratamiento oportuno.
Este tipo de cáncer posee el tumor maligno más frecuente en las mujeres occidentales y es la principal causa de muerte por cáncer en mujeres en Europa, Estados Unidos, Australia y algunos países de América Latina. En Argentina se producen aproximadamente 5600 muertes por esta enfermedad y se diagnostican alrededor de 19000 casos nuevos cada año.
El cáncer de mama es el crecimiento descontrolado de las células mamarias que se produce como resultado de mutaciones o cambios anómalos en los genes que regulan el crecimiento de las células y las mantienen sanas.
Normalmente, las células del cuerpo se renuevan mediante un proceso específico llamado crecimiento celular; las células nuevas y sanas reemplazan a las células viejas que mueren. Cuando se producen mutaciones, la célula modificada adquiere la capacidad de dividirse sin ningún control u orden, se multiplica y genera un tumor.
Si bien se nota un aumento en la ocurrencia de cáncer de mama, también han aumentado las tasas de supervivencia y el número de muertes asociadas a esta enfermedad disminuye constantemente, en gran medida debido a factores como la detección temprana y un nuevo enfoque de tratamientos personalizados, de acuerdo al tipo de tumor.
¿Cuáles son los factores de riesgo?
El cáncer de mama puede afectar a cualquier mujer. Se estima que 1 de cada 8 a 10 mujeres desarrollará cáncer de mama a lo largo de su vida. El factor de riesgo más importante es la edad: la incidencia aumenta a partir de los 50 años.
Los antecedentes familiares son importantes. El 5 al 10 % de los cánceres de mama se deben a la herencia de una mutación en los genes BRCA 1 y BRCA 2, y en esos casos se habla de cáncer de mama hereditario.
En general, se trata de familias con múltiples casos de cáncer, tumores en mujeres jóvenes y aparición de otras neoplasias como ovario, colon, páncreas. Las mujeres con historia familiar deben recibir recomendaciones especiales para sus controles, basadas en su riesgo.
Prevención y diagnóstico temprano
No se disponen de métodos eficaces para la prevención, pero existen medidas generales que pueden disminuir la probabilidad de desarrollar la enfermedad: adoptar un estilo de vida saludable, reducir el consumo de grasas y alcohol, y realizar ejercicio físico en forma regular.
En cuanto al diagnóstico temprano está demostrado que cuanto más pequeño sea el tumor detectado existen mayores posibilidades de curación.
La mamografía es la herramienta más importante que existe para detectar cáncer de mama en la población. Este es un procedimiento diagnóstico que utiliza una mínima cantidad de radiación, inocua para la salud. La dosis efectiva de radiación en una mamografía es equivalente a la que cualquier persona recibe por la radiación ambiente en el transcurso de un mes.
Se recomienda que todas las mujeres se realicen una mamografía una vez por año a partir de los 40 años. Si existe riesgo aumentado, el especialista determinará a qué edad comenzar a realizarla y con qué frecuencia.
Las posibilidades de curación dependen directamente del avance de la enfermedad al momento del diagnóstico, por eso es tan importante realizar los controles periódicos.