No podemos negar que de todos los estudios de cine, Disney es el que mayor cantidad de aportes ha realizado al cine de animación, pues son varias las películas que ha lanzado y que marcaron al espectador. Además, nos otorgó personajes de lo más memorables e icónicos, como podría ser el caso de las Princesas Disney.

La primera de ellas llegó en el año 1937 de la mano de Blancanieves y los siete enanos, y desde entonces, surgió una tendencia de narrar historias donde sus protagonistas son dignas herederas de la realeza y que nos demostraron que todo es posible.

Sin embargo, algo que Disney parece obviar en las películas de sus princesas es en qué momento de la historia están ubicadas, pues si bien nos encontramos ante historias de fantasía, existen varios elementos que ofrecen pistas de que las mismas están ambientadas en un tiempo concreto.

Si lo vemos en un orden cronológico, la princesa Disney que sigue en la lista es Aurora, la protagonista de La bella durmiente (1959), pues su historia toma lugar en Inglaterra alrededor del año 1300, mientras que Mulán ocurre un siglo después, en el 1400, incluso a pesar de que la leyenda en la que se basa transcurre mucho tiempo antes. 

Nos transportamos a mediados del siglo XVI en Alemania para la historia de Blancanieves y los siete enanos y si nos movemos hacia el año 1607, nos ubicaremos en la historia de Pocahontas. Recordemos que este clásico del cine de animación está basado en hechos reales, por lo que existen pruebas de que la verdadera Pocahontas conoció al inglés John Smith cuando este llegó a Virginia con su expedición en 1607.

Ya en el siglo XVIII podemos ubicar a dos princesas Disney: Bella (La bella y la bestia), la cual se ambienta en Francia en un período anterior al de la revolución francesa (1789); y Ariel (La sirenita).

De esta última no existe gran certeza de que su historia se ambienta en el 1700, pero debido a su historia que aborda las famosas leyendas de sirenas y piratas, los historiadores y expertos en el tema han decidido asociarla a esta época, donde dichos relatos estuvieron más presentes.

De Cenicienta no existen muchos detalles sobre dónde transcurre la historia, pero sí se sabe que es en el siglo XIX; y lo mismo ocurre con Enredados (pues algunos afirman que transcurre en el 1700 y otros en el 1800).

Sin embargo, debido a las fuertes teorías que conectan a esta última con Frozen (la cual transcurre a mediados del siglo XIX), han decidido asociar las fechas y así conectar aún más las historias.

Podríamos decir que la princesa Disney “más moderna” del cine de animación es Tiana, de La princesa y el sapo (2009). El contexto de cuándo transcurre la historia es muy claro: el Nueva Orleans de la década del 20, en plena era del jazz (el cual está muy presente en la trama). Gracias a un detalle en un diario, podemos ser más precisos y afirmar que el año exacto en el que se ubica es abril de 1926.