Si algo ha marcado a Disney es un concepto: diversificación.
Tras una crisis enorme que amenazó con destruir los estudios, la compañía tomó la decisión de no poner todos los huevos en la misma cesta y creó Disneyland, el parque temático en California.
Tras eso vinieron otros (además de ampliaciones a medida que compraban franquicias, como el Campus de Los Vengadores o Galaxy’s Edge de ‘Star Wars’), merchandising, videojuegos y plataformas de streaming.
Pero algo que también tienen es una flota de cruceros que están a punto expandir con nuevos, enormes y lujosos barcos. Y uno de ellos es el Disney Treasure.
Parques sobre el agua:
Con ese espíritu de abarcar cuantos más campos, mejor, Disney tomó la decisión de que los cruceros podían ser una buena línea para generar ingresos. Teniendo en cuenta que la gente paga por sus hoteles en los parques temáticos, ¿por qué no crear cruceros temáticos para toda la familia? Así, en 1999 se lanzó el Disney Magic, el primero de una línea de cruceros tematizados que actualmente no destaca ni por su capacidad ni por sus dimensiones, pero sí por su línea.
A partir de entonces hemos visto otros cuatro cruceros Disney, siendo el más reciente de 2022 y, aunque la temática abordo es diferente y hay ligeras distinciones entre los buques, la estética es muy similar entre ellos, con un tinte clásico. Y, si me preguntas, recuerdan al Titanic, alejándose de las moles de compañías como Royal Carribean. El Magic (que fue remodelado en los astilleros de Navantia en Cádiz a finales de 2013) y el Wonder fueron construidos por el astillero Fincantieri en Italia. Los Dream, Fantasy y Wish (notablemente más grandes) son obra del astillero alemán Meyer Werft.
Otra bestia marina:
Construir un crucero es como montar un enorme y carísimo LEGO, y ahí los astilleros Meyer Werft tienen experiencia y espacio en su dique seco para poder crear estas moles que flotan.
Una de sus últimas construcciones es el Disney Treasure, un crucero que se mantiene fiel a la línea que se marcó en los astilleros italianos para el Magic, pero con un toque más moderno en algunas de sus partes y, sobre todo, un tamaño descomunal.
Pesa unas 144.000 toneladas brutas, funciona con gas natural licuado, tiene 15 cubiertas y cuenta con una eslora de 341 metros por 41 metros de manga.
La velocidad máxima es de unos 20 nudos (unos 37 kilómetros por hora), tiene una tripulación de 1.555 personas y capacidad para 5.000 pasajeros. Son números a la altura de cualquier otro de los enormes cruceros que surcan los mares y comenzará su travesía en diciembre de este año.
Temática aventurera (aunque entra todo).:
Más allá de por sus características técnicas, el Treasure destaca por la oferta de entretenimiento interior.
Muchos cruceros familiares parecen parques de atracciones, pero aquí estamos hablando de un crucero de Disney. Eso significa que tiene multitud de camarotes tematizados, salas que simulan estar en el ambiente de algunas de sus películas y, aparte de atracciones más clásicas como los típicos toboganes de agua y las actividades recreativas, hay representaciones teatrales o musicales.
Aunque varias cintas de la compañía están representadas, la temática principal es la de aventura. Ahora bien, si hay unos protagonistas aquí son Jasmín y Aladdín, ya que una enorme estatua de ellos preside el gran salón central y varias de las estancias principales cuentan con motivos dorados, rindiendo homenaje a los palacios asiáticos.
Prepara la cartera:
El Treasure tiene 1.254 camarotes. Hay habitaciones sencillitas, de unos 15 metros cuadrados, y sin vista al mar, pero esto es como cualquier otro crucero: si estás dispuesto a pagar, puedes tener una habitación más grande que tu casa. Tanto es así que hay una suite de un solo piso con 140 m2, otra suite de dos dormitorios con terraza con 163 m2 y la Concierge Tomorrow Tower Suite de dos pisos, capacidad para ocho personas y 182 m2. Esta habitación es una barbaridad que cuenta con biblioteca, cinco baños, salón, despensa, bar y dos vestidores: uno para cada una de las habitaciones principales.
No faltan cinco televisores, persianas motorizadas de dos pisos y zapatillas de andar por casa, que siempre es importante.
El viaje inaugural será el 21 de diciembre y, como siempre, el precio dependerá de la fecha.
Para el 8 de marzo del año que viene, tenemos habitaciones desde 2.592 euros la más barata por persona, hasta los 11.078 euros en la Suite Concierge de un dormitorio.
Si nos vamos al 22 de marzo, tenemos disponible una Suite Royal de un piso por 17.158 euros y, para el 19 de abril, una Suite Royal Concierge de dos dormitorios por 21.718 euros por persona. Pero recuerda que te dan las zapatillas.
Desembarco europeo:
Lamentablemente, al precio de los camarotes hay que sumar el de desplazarse hasta el punto de inicio del crucero, ya que como es habitual en los cruceros de la compañía, el puerto de partida será Puerto Cañaveral, en Florida.
Ahora bien, parece que Disney va a empezar a operar de forma más regular en Europa y ya hay varias fechas para realizar cruceros tanto por el Atlántico como por el Mediterráneo, con salidas desde el puerto de Barcelona.
Una vez conocemos el Treasure, toca esperar porque Disney está preparando un crucero aún más grande y lujoso, pero todavía no hay detalles.