José Manuel Rey, el director de la red de museos de Vigo, confirmó que en 2025 habrá una programación importante en torno al centenario de la donación del Pazo Quiñones de León a la ciudad y del inicio de la colección municipal. Como es conocido, la finca era propiedad del marqués de Alcedo, Fernando Quiñones de León, que donó su residencia al pueblo de Vigo para que se convirtiese en un museo y en sus jardines, un parque público.
Originalmente, era propiedad de su esposa, María dos Milagros Elduayen, marquesa de Valladares y a la muerte de su hijo sin descendencia, le quedó en herencia. Desde 1925 pertenece al pueblo de Vigo, tanto el pazo como los jardines y bosque.
La exposición “El Pazo de Castrelos en el Centenario de su donación 1925-2025” será, por tanto, una de las cuatro grandes previstas para el próximo año.
Otra exhibición, también de otra donación se realizará en torno a la figura de Irene Ceballos, la viuda de Policarpo Sanz. Irene vivía en Nueva York y allí conoció a Policarpo Sanz. Estuvo en contacto con los grandes movimientos artísticos de la época y reunió una colección pictórica que donaría al Museo de Vigo. Aunque el legado más grande fue el Instituto Santa Irene, como quedó escrito en el testamento que cedía los terrenos para su construcción.
Además, también se contempla la muestra “Cien años de coleccionismo fondos de arte gallego del Concello de Vigo”, que estará en la primera planta de la Casa das Artes y en la planta primera y segunda de la Pinacoteca. “En 2025 celebraremos el centenario de la donación del Pazo Quiñones de León que suma ese capital simbólico que los ciudadanos entienden que es el museo de la ciudad”, explicó Rey durante la presentación esta semana del plan estratégico de los museos, que como ya informó este diario, supondrá una revolución en contenidos e incluso horarios.
El pazo de Castrelos tendrá así, en su centenario, otra visión. “En este momento hay mucho ruido, hay demasiadas cosas y hay que simplificar de cara a un museo monográfico que ponga en valor el pazo, su historia, sus jardines e ilustre las formas y modos de vida en el pazo a través de su mobiliario, de sus artes decorativas o a través de su colección de pintura”, señaló José Manuel Rey.
En el proyecto estratégico Castrelos será el museo de la identidad, en tanto que la colección arqueológica irá al Verbum, museo de la memoria. La contemporaneidad se repartirá entre Casa das Artes, Casa Galega da Cultura y Pinacoteca, con el añadido de Marco y la Fundación Laxeiro.
El reparto de espacios en los museos
El proyecto museístico a desarrollar desde 2025 prevé cambios muy amplios. En el caso de la Casa das Artes, la planta baja estará dedicada a exposiciones temporales de acuerdo con convocatoria pública anual. En la planta primera, la colección de arte contemporánea gallega del Concello. “Estamos trabajando para que en los próximos meses podamos darla a conocer. En la planta segunda trabajaremos en la revalorización de la colección Luis Torras, y en la tercera está la Fundación Laxeiro”.
En la Pinacoteca, la planta baja será para exposiciones temporales, la planta primera y segunda a la colección de arte gallega contemporánea y en la planta tercera la colección Colmeiro.
En la Casa Galega da Cultura, la planta baja se dedicará a exposiciones temporales a valores emergentes nacidos o residentes en Galicia de menos de 35 años, “como una muestra del compromiso del Concello con el talento creativo”. En la planta primera, accesible a la ciudadanía el museo Francisco Fernández del Riego.
En Samil, la planta baja del Verbum será para arqueología. En la -1 depósitos. En la planta primera se habilitará espacio para explicar la historia de la ciudad. “Un viaje en el tiempo que enlazará el pasado más antiguo y los acontecimientos que dieron sentido a la ciudad de Vigo”, aseguró José Manuel Rey.