Quienes quieran vivir una auténtica experiencia de relajación, desconexión y bienestar, sin duda deben acudir a un balneario.
Y es que se trata de una de esas actividades que hay que probar al menos una vez, entre otras cosas, debido a los numerosos beneficios que aporta una visita a estos espacios.
Uno de los más evidentes, por el que tantas personas disfrutan de los balnearios, tiene que ver con la tranquilidad.
Es decir, la posibilidad de descansar del ruido, el ajetreo y el estrés del día a día, ya que buena parte de estos enclaves se encuentra en parajes naturales. También cabe destacar otra de sus virtudes: una mejora de la salud.
Los minerales presentes en sus aguas termales estimulan el sistema inmunológico y la circulación sanguínea, además, favorecen los síntomas o incluso la recuperación de algunas enfermedades.
Por todo ello, los balnearios representan una excelente excusa para hacer una pequeña escapada de fin de semana.
Además, no será difícil encontrar uno cercano, ya que los hay por muchas ciudades de España. Aunque algunos de ellos destacan por encima de otros debido a la calidad de sus aguas y de sus instalaciones.
Estos son los mejores balnearios que hay que visitar al menos una vez en la vida:
Balneario de Baños de Montemayor, Cáceres
El balneario de Baños de Montemayor, situado en Cáceres, representa uno de los que requiere una visita obligatoria. Fue declarado Bien de Interés Cultural en 1995 y consiste en un complejo termal, que se nutre de las aguas provenientes de dos manantiales. Estas contienen una serie de características y cualidades idóneas para llevar a cabo tratamientos enfocados a la salud y a la belleza. Es por ello que sus instalaciones se dividen principalmente en tres áreas, una dedicada a los tratamientos centrados en mejorar la salud; una segunda enfocada al relax, con circuitos y termas romanas; y otra de belleza, para los tratamientos estéticos.
Balneario de Archena, Murcia
En el Paraje Natural de Valle de Ricote, junto al río Segura, se encuentra el balneario de Archena, un complejo termal con más de 200.000 metros cuadrados. Las propiedades minero-medicinales de sus aguas hacen que bañarse en ellas suponga una experiencia positiva para la salud del cuerpo. Resultará beneficioso para personas con reumatismos, dolores vertebrales, estrés, ansiedad e incluso ciertas condiciones dermatológicas.
Las Caldas Villa Termal, Asturias
En el norte de España destaca el balneario de Las Caldas Villa Termal, situado a tan solo ocho kilómetros del centro de Oviedo, en Asturias. Una antigua casa de baños del siglo XVIII que hoy ofrece a sus visitantes una experiencia de bienestar única. Las aguas de estas termas naturales poseen mineromedicinales se emplean para proporcionar una mejor en la salud física y mental. Para ello disponen de diversos tratamientos, hidroterapias y demás servicios enfocados al confort. Igualmente cuentan con programas enfocados a tratar ciertas patologías, como pueden ser las respiratorias o las reumatológicas.
Balneario de Mondariz, Pontevedra
En el corazón de Galicia, en Pontevedra, se ubica el balneario de Mondariz, en activo desde 1873. En él se puede disfrutar de relajantes circuitos termales, así como de otra serie de tratamientos, ya sea de forma individual como en pareja, con amigos o en familia. Sus instalaciones, que fueron renovadas en 2020, cuentan con varios circuitos, como su piscina activa con camas de agua, los bancos de hidromasaje, los cuellos de cisne o los chorros verticales. Así como géiseres, hidromasajes e incluso una gran cascada en lámina de agua. A esto todavía hay que añadir jacuzzis, saunas y una poza de agua caliente al aire libre, entre otros espacios.
Castilla Termal Olmedo, Valladolid
Tranquilidad, paz y relajación entre los muros de un antiguo convento del siglo XII, así es el balneario Castilla Termal Olmedo, en Valladolid. Una experiencia de bienestar en sus aguas mineromedicinales, que pueden disfrutarse en su piscina termal, provenientes del manantial de Sancti Spiritus. Estas serán capaces de mejorar la salud, especialmente en lo que se refiere a ciertas enfermedades y trastornos en particular, como los dolores musculares o articulares. Disponen de una piscina interior y otra exterior, así como diferentes jacuzzis, chorros relajantes, cañones de agua y cortinas. Además de otra serie de zonas enfocadas al reposo y la realización de tratamientos y terapias.
Balneario de Panticosa, Huesca
En Huesca se sitúa el balneario de Panticosa, dividido en tres edificios: la Termas de Tibero, con 8.500 metros cuadrados; el Balneario Termo Medicinal El Quiñón, dedicado a los deportistas; y el Espacio Termal Gran Hotel, su espacio más exclusivo. Las aguas mineromedicinales del balneario de Panticosa brotan del manantial de Tiberio y están indicadas para la realización de diversos tratamientos mediante técnicas hidrotermales. En el caso de las Termas de Tibero, el circuito incluye toda una serie de zonas, como la piscina central con chorros a diferentes alturas, la piscina de contrastes, la piscina exterior con hidromasaje, la sauna finlandesa, el vaporarium, el pediluvio y la ducha nebulizada, entre otras.