RECUERDA LO SIGUIENTE:
A veces es la ternura la que nos salva y no todo se sana con fuerza o exigencia, una palabra suave, una mirada que no juzga, una presencia que no exige, porque en un mundo que corre, grita y empuja voy entendiendo también que la calma también es valentía, que respirar lento, que detenerse, que escuchar el temblor de tu alma sin huir de él también es un acto de coraje, y no necesitamos parecer fuertes si nos estamos desmoronando y no hay porque disfrazando el dolor con sonrisas forzadas ni esconder las grietas para encajar en un molde que no nos pertenece , por eso yo espero que hoy tu elijas abrazarte como eres, con todo lo que duele, con todo lo que sientes.
Y es que qué importante aceptar que somos humanos que sentimos y que en esa honestidad hay una fuerza inmensa, porque ser vulnerable es abrir el corazón sin garantías , mostrar la herida sin saber si sanará rápido, es quedarte cuando todo en ti quiere escapar, y eso es lo más valiente que puedes hacer por ti, porque a veces lo que te salva no es luchar sino rendirte en lo que eres con amor y con ternura.
